Hipertensión: “El Asesino Silencioso”

Esta condición sigue siendo una de las más relacionadas a problemas cardiovasculares. Si usted padece de esta enfermedad y no está controlado y tratado sepa que no solamente está afectando su corazón, sino también sus riñones, su visión y su cerebro Sin embargo, muchos pacientes desconocen que padecen de ella.

La revisión de las últimas guías establecieron valores más estrictos, por lo que el número de pacientes pre-hipertensos e hipertensos va en aumento cada día. Esto es así, porque actualmente una presión arterial de 120/80 se considera pre-hipertensión, cuando antes este valor se consideraba normal.

Aunque este nuevo grupo de pacientes pre-hipertensos no necesitan terapia inmediata, es de suma importancia hacer ciertos ajustes en sus estilos de vida, tales como:

  • bajar de peso;
  • llevar una dieta balanceada;
  • comenzar una rutina de ejercicios (caminar 30 minutos al día);
  • dejar de fumar;
  • limitar el consumo de alcohol;
  • entre otros (consulte a su médico).

Los pacientes diabéticos o con problemas renales deben tener una presión arterial en menos de 130/80. En muchas ocasiones estos pacientes necesitan más de un medicamento para controlar su presión.

Los síntomas más comunes para determinar si usted padece de hipertensión son:
  • dolor de cabeza;
  • dificultad para respirar;
  • dolor de pecho;

Sin olvidar que muchos de estos pacientes no confrontan síntoma alguno. Es por esto que usted debe visitar un profesional de la salud que verifique su presión arterial y determine el tratamiento adecuado para usted según su necesidad.

La Sociedad Puertorriqueña de Cardiología conciente de esta enfermedad crónica que aqueja a un alto porciento de la población, se une al Departamento de Salud en la misión de orientar y educar a nuestros pacientes. Es nuestro mayor deseo contribuir en la disminución del número de pacientes que padecen de esta condición y de los que desconocen su padecimento los cuales llevan un tratamiento inadecuado y una presión arterial descontrolada.

Prevención es la mejor medicina.